miércoles, septiembre 05, 2007

El tema de esta semana será el 11 de Septiembre de 1973. Me gustaría que 'dialogaran' respecto de las significaciones individuales (personales), familiares y sociales que esta fecha les convoca. Qué les motiva. Cómo se liga a la caída de las 'Torres Gemelas'. Hay diferencia cuando se habla de Lo Público en dictadura y en democracia. Qué tan lejano les parece este hecho de la historia reciente nacional; etc.

Hasta allí la invitación.

Saludos, Agustín.

35 Comments:

Anonymous Anónimo said...

El 11 de septiembre en lo personal, por lo que me han contado, mi familia, no influyo en el sentido de tener que acudir al exilio, ni ser detenido desaparecido, ni hacer largas filas para poder conseguir alimento. Mi familia, ósea, mis abuelos maternos y paternos trabajaban en los fundos haciendo trabajos de campo o de cuidar el fundo. Además no eran adherentes al gobierno del presidente Salvador Allende y tampoco estaban inscritos en ningún partido político. Más que nada era el dueño del fundo el que veía esos temas. Y en lo personal ninguna de mis dos familias, ose, paterna ni materna pasaron necesidades debido a que el patrón les entregaba lo que necesitaba.
Pero igual existía temor sobretodo con los toques de queda, o si te allanaban la casa y/o poseías cosas del estado también tenías problemas. Doy gracias a Dios por que mi familia más cercana no sufrió, ¿habrá sido cosa del destino o suerte?
Creo que todavía, en la actualidad, sigue siendo un tema muy delicado para las personas que sufrieron y que les toco vivir la otra cara de la moneda, yo lo que veo personalmente es que esa herida todavía no cicatriza bien en el corazón de algunos chilenos y por lo demás creo que tienen que vivir su dolor o luto tranquilos como todo ser humano que pierde a un ser querido.
La caída de las torres gemelas, en mi opinión personal, se liga en el sentido de que es la misma fecha, de que fue un suceso que marca trágicamente a un país en el cual muere mucha gente inocente. Bueno, además, se dice que Estados Unidos estuvo muy ligado en que el golpe militar sucediera en el país para que fuera contra el socialismo o el movimiento socialista que se estaba produciendo en Latino América.
Para mí en la actualidad el 11 de septiembre es una fecha en la cual la ciudad de santiago vive estragos en la vía pública, en donde la gente tiene miedo de salir ya que hay protestas, se producen estragos. Pero obviamente el suceso que recuerdo es el de la caída de las torres gemelas ya que fue un acontecimiento que lo viví en el sentido que estaba viva y estaba más grande en cambio el del golpe solo sé los sucesos contados por mi familia y los entregados por la escuela.

Isabel Donoso Gatica
ing. agronómica
isa_alma_blanca@hotmail.com

1:52 p. m.  
Blogger Unknown said...

Es dificil opinar respecto a un tema tan delicado como lo ocurrido el 11 de septiembre del ’73 especialmente cuando no se vivió el suceso en carne propia, pero si hay que opinar uno ha de tomar la amplia gama de comentarios que existen y formarse una propia opinión. Podría disponerme a contar o rebatir si los hechos previos al golpe militar fueron o no como se plantean, como por ejemplo lo de las “larguísimas filas interminables para comprar un par de panes” y cosas por el estilo, pero me parece que ese no es fondo del presente dialogo, aunque antes de hablar de las implicancias, familiares quisiera escribir algunas palabras respecto a los hechos sociales que rodean al quiebre democrático que nos convoca en esta oportunidad que desencadenan un apreciación personal. Cuando uno escucha con atención a quienes apoyaron la decisión de tomar el poder con las armas nota que los argumentos son recurrentemente “iguales”, que son resumibles en una decadencia económica, evidenciada por la escasez y por la inflación del momento lo que por supuesto tenia redundancia en la calidad de vida de los chilenos, situación que de todas maneras había que remediar, es ahí cuando se me viene a la cabeza una pregunta que hecha fuera de contexto pareciera muy simple ¿cuánto vale la vida humana?, es decir, ¿se justifica la muerte de miles de personas por la necesidad de estabilizar la moneda nacional o para mejorar las remuneración o el acceso a los productos de consumo? Para mi NO. Quisiera tambien, al mismo tiempo que acepto la inviabilidad de un gobierno como el de Salvador Allende, exponer una situación que de haber sido considerada, las repercusiones sociales de un genocidio como el del año 1973 no debieran haberse producido, y esta corresponde a una aceptación de por parte del Presidente Allende de una mala gestión que afectaba profundamente la calidad de vida de los chilenos que lo llevo a tomar la decisión de llamar a plebiscito para el año 1974, situación conocida por los militares y que fue ignorada por estos últimos a conciencia de la catástrofe consecuente con estas decisiones. Me refiero a que, personalmente estimo que las muertes que hasta hoy día afectan a las familias y a la sociedad chilena (evidenciado por las manifestaciones del día de hoy en el cementerio general) pudieron haber sido evitadas, a pesar de esto quisiera manifestar mi desacuerdo con la forma de las expresiones de desagrado con los hechos ocurridos el 11 de septiembre de 1973.
Quisiera ahora referirme a los tópicos planteados por el profesor, personalmente no hubo significaciones mas allá del desagrado y del altísimo grado de desacuerdo que me produce pensar en lo que ocurrió, muy parecido a lo que ocurre con el resto de mi familia, que dicho sea de paso es poco numerosa lo que redunda en cierto grado en la poca diversidad de apreciaciones y opiniones de lo ocurrido y que este factor influye en cada una de nuestros puntos de vista. Es decir, cuando llega esta fecha personalmente y familiarmente manifestamos sentimientos parecidos, diferenciados en la magnitud de ellos, que corresponden , como lo he manifestado ya varias veces, a desagrado, desaprobación y por supuesto compasión por aquellos que sufrieron a causa de la “manipulación” de los Estados Unidos de Norteamérica sobre los gobiernos socialistas. Esta aseveración me acerca al siguiente tópico expuesto por el profesor, de no haber acaecido esta especie de intento de “dominio” mundial por parte de este país del norte a través de la economía y de los recursos naturales no renovables, es decir, petróleo, estoy seguro que el ataque a las torres gemelas no hubiera ocurrido pues estas diferencias religiosas que muestra la cultura árabe con la cultura occidental no son tan importantes como las disputas por el petróleo comenzadas con la ocupación parcial a Irak y a Iran después de la guerra del Golfo.
Cuando hablamos de lo publico en democracia y en dictadura quisiera poder decir que hay diferencias, pero la verdad es que al fin de cuentas la única diferencia es que quienes toman las decisiones han sido elegidos o autoimpuestos, pero la tendencia social o económica va a depender de la formación y preferencias del individuo mas que de la forma en que llega al poder.
En relación a la percepción de cercanía o lejanía de este hecho con la actualidad nacional, me parece que se han ido diluyendo los efectos del golpe militar y llegará un punto en que las siguientes generaciones solo lo consideraran simplemente como un hecho histórico que solo afecto a sus antepasados mas lejanos. Las decisiones tomadas por nosotros serán de mayor trascendencia para ellos (generaciones futuras) que las tomadas por nuestros padres y abuelos en la década del ’70 a causa de los hechos ocurridos durante su vida. Quisiera decir que hay quienes aprovechan esta fecha para delinquir razón por la cual, las manifestaciones violentas han permanecido en el tiempo, pero no gracias a los protagonistas reales, sino que por el lumpen.


Julio Valdebenito
Koberock008@yahoo.es

7:44 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Personalmente para mi el 11 de septiembre de 1973 no corresponde a una vivencia, ya que obviamente para esa fecha yo aún no nacía, es por eso que lo que más se es por las vivencias de mis padres y/o familiares, en ninguna de mis dos familias se tuvo que acudir al exilio, y tampoco existió algún detenido desaparecido, en cierta medida fue casi un alivio, ya que mi familia materna debía ir tarde y a escondidas a comprar alimentos en la época de la Unidad popular, más aún cuando mi abuelo era un ex militar, obviamente que para ellos este período no fue fácil, sin embargo el de la dictadura quizás fue un poco más fácil. Mi postura es que creo que se debe dejar de mirar el 11 de Septiembre como una fecha actual, me explico, a veces le damos tanta importancia a algo que ya ocurrió hace 34 años que no permitimos construir el futuro sin rencor, no soy partidaria del período de la dictadura, en especial con todo el tema de los detenidos desaparecidos, pero creo que esa parte de nuestra historia como país ya pasó, hay que recordarla pero no hacer de esa fecha un día en que se paralicen las actividades nacionales.
Ahora en relación con el atentado de las torres gemelas, creo que la única similitud es la fecha, ya que creo que el motivo de ese atentado fueron intereses económicos supremos, en cuanto a este hecho lo podré contar como una “vivencia” ya que o tenía la edad suficiente como para poder recordarlo.

Francisca Ruiz Gozalvo
I. Forestal

6:52 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

franciscaruiz86@gamil.com

6:52 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

El golpe de estado del 11 de Septiembre de 1973 es para mi un hecho de gran importancia para el país. Si bien, en mi caso, no existieron experiencias de torturas, desaparecidos y exilio, siento una gran angustia por los que si sufrieron en esa época. Creo que es un tema que no se olvida por mucho tiempo que pase y creo firmemente que es algo que no se debe olvidar ni perdonar. No olvidar en el sentido que este acontecimiento debe ser discutidos fuertemente dentro de la educación, de modo de no perder la conciencia que se ha generado o se genere al respecto. No perdonar tampoco, por que es un hecho que marcó a una generación en torno al miedo y la impotencia, y significará un daño y pérdida irrecuperable por muchas generaciones más.

Sé que tal vez mi opinión de no perdonar es dura considerando que yo estaba lejos de nacer cuando esto ocurrió, pero son nuestros padres y abuelos, parientes cercanos los que vivieron atemorizados y creo que por eso mismo es un tema muy cercano a nuestra generacion y a nuestros hijos.

Con respecto a la relación existente con la caída de las torres gemelas, creo que no es más que un hecho que opacará la significancia que nuestro 11 de septiembre tiene en nuestra sociedad, creo que es lamentable y espero que no siga siendo desplazada, de modo de no perder la lucha que muchos siguen teniendo por hacer justicia por sus seres queridos.

Constanza Jiménez Pérez
coniferajp@yahoo.com

9:17 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

El 11 de septiembre en lo personal es un día más ya que al igual que los otros comentarios mi familia no se vio afectada directamente, no tenemos detenidos desaparecidos y aunque mi familia materna era partidaria de Pinocho y mi familia paterna era partidaria de Allende nunca me educaron tratando de inculcarme un tendencia, es más mis papas no pescan el tema, yo creo que esto es algo que ya paso y aunque es importante y hay que recordarlo por respeto a las personas que fallecieron, considero que no es necesario seguir metiéndole cizaña al asunto, por otro lado, siempre los que manifiestan dejando la caga en las calles son pendejos que no tienen nada que ver, solo salen a provocar disturbios y a atemorizar a la gente, de paso robando y rompiendo la infraestructura pública.

Como todo hecho histórico merece ser recordado no solo por lo que sucedió sino también como un recordatorio para que no nos vuelva a suceder. Y con respecto al atentado de las Torres Gemelas no le veo ningún vinculo solo la fecha, además de ser ambos hechos catastróficos que golpearon a dos países distintos pero en el lugar que más duele “El pueblo”

Evelyn Videla
Magdalinis@hotmail.com

9:26 a. m.  
Blogger Carla D. said...

Difícil es para mí referirme a este tema de manera tan abierta. Si bien es cierto yo no existía, mi familia si, y desde siempre se me inculco que por la boca muere el pez. Nosotros como familia, no hablamos mucho del 11 a no ser que estemos reunidos y al lado de un vino porque hablar tan abiertamente de un tema para todos doloroso, no es fácil, y hay temor a pesar de los años.
Mi padre fue preso político, y mi familia como tal fue victima directa de las torturas y vejámenes más terribles al ser humano, y aunque nunca hablemos de este tema, es lógica mi postura frente a esto.
Creo que el dolor causado a una patria entera, la falta de humanidad de los militares involucrados, no debe ser olvidada ni aunque pasen 100 años. Este hecho ya se inscribió como parte de nuestra historia y como tal debe ser conmemorado, para que no se olvide la maldad y el terror causado por el abuelito que bien muertito esta (sin ofender a los momios presentes).
Si bien es cierto mi padre no alcanzo a ser asesinado, las cicatrices son eternas y no solo en el, sino en el subconsciente de todo el país, y son determinantes en el comportamiento reprimido de todas las generaciones posteriores.
El contexto político y económico en el cual se desarrollo esto, es conocido por la mayoría, pero el dolor y las marcas en las personas solo unos pocos las conocemos. Es distinto ver un reportaje en el “contacto” que escucharlo de la propia boca de tus padres.
Se sabe que la gran ayuda prestada por parte de EE.UU, hizo posible el desarrollo del golpe, y más que evocar al “ojo por ojo” las intenciones económicas son determinantes en ambos casos.
No se puede construir un país justo y democrático, sin asumir y reparar los errores del pasado, los cimientos ya están y esos son ¿Por qué tratar de ponerse una venda en los ojos y hacer como que nada de eso ocurrió. Y cuando hablo de reparar, no me refiero precisamente a un par de nombres en una lista para una futura pensión.
Y nada más porque por la boca muere el pez.

Carla Dosque F.
Ing. Agronómica

carlitarecords@gmail.com

9:46 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

En lo personal esta fecha no me provoca nada mucho (la verdad soy apolítico). Más bien solo un poco de aburrimiento de escuchar siempre lo mismo, de que ambos lados sigan peleados. Es verdad, yo no viví la dictadura y hay que ser comprensivo pero creo que ya ha pasado bastante tiempo, incluso de la vuelta a la democracia, pronto van a ser 20 años. Creo que se esta intoxicando a la juventud de hoy con estas antiguas peleas. No es ser hipócrita, ni falto de respeto, pero ya deberían ir solucionándose los problemas. Fue atroz todo lo que paso, el atentado a la democracia… Creo que se esta utilizando esta fecha, por algunos, solo para hacer destrozos y demostrar anarquía.
Es obvio que lo público en dictadura no es lo mismo que en democracia. En la primera más bien te imponen lo que quiere el dictador, sin mucho que tú puedas hacer. Si protestas eres reprimido. Deja de existir en ese sentido lo público. En democracia es un derecho lo publico, porque todo es de todos.
No veo una relación directa entre lo que paso el 11 septiembre de 2001 en USA, con nuestro 11 de septiembre.

Juan Pablo Vial Silva

5:07 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Para mí este día es recordado por el hecho histórico sucedido en nuestro país, y no trae una experiencia familiar tan lamentable, penosa e injusta como lo fue para un grupo masivo de chilenos. Sin embargo mis padres me cuentan de los difíciles momentos que tuvieron que pasar en varias ocasiones para lograr salir a sus trabajos, ir a comprar y realizar las actividades que se hacen a diario.

Es muy distinto hacer la referirse a público en el tiempo de la dictadura que en el de hoy. En aquella época sin duda era muy difícil hablar de lo público, y los derechos públicos de cualquier ciudadano, pues gran parte de ellos fueron prohibidos, según mi postura, sin una explicación realmente justificada para ello y para la gran cantidad de injusticias, crímenes y violaciones ocurridas en ese entonces.

En cuanto a la vinculación de la dictadura con la caída de las torres gemelas, ambos son sucesos trágicos, difíciles de tratar, y lamentables ocurridos en la misma fecha solo por coincidencia.

No creo que la dictadura sea un hecho para echar al olvido en un tiempo mas, ya que dejo una gran cicatriz no sólo en los tantos chilenos que sufrieron las consecuencias de esta, sino también en los vivieron el periodo y transmitieron su experiencia a sus hijos y nietos. Pero si creo que hoy nosotros y las nuevas generaciones mucho mejor, serán capaces de hablar y discutir mas objetivamente el tema, pues las aguas estarán mas apaciguadas y los acontecimientos serán mas lejanos.

Natalia Smith
Ing. Forestal

5:08 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Esta fecha es muy significativa no sólo para la historia de nuestro país, sino también para el mundo entero por lo sucedido con el atentado a las torres Gemelas.
Si bien no me toco vivir en esa época tan conflictiva, creo que el pesar de los familiares de detenidos desaparecidos lo explica todo.

Pero que pasó con ellos, realmente se ha hecho justicia?, ojala esto sirva de experiencia para que los gobiernos venideros y las fururas generaciones puedan disfrutar de la dulce democracia.

Alejandra León.
Ing. Agronomica.

5:21 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

El 11 de septiembre de 1973 es un día que no viví y espero no vivir, sin embargo, creo que debe haber sido una experiencia muy marcadora para quienes sí lo vivieron y por supuesto una fecha para no olvidar por el resto de sus vidas.

Para mi todo lo que pasó en ese período del país es algo muy alejado de mi vida, en mi familia no hubo nada terrible salvo por los toques de queda y esas cosas horribles, pero nada que afectara o marcara a mi grupo familiar, pero sí creo que no es lejano para nadie que sea chileno porque hubo muchos daños a los derechos humanos, mucha violencia y sobre todo mucha mentira.

Creo que si bien es demasiado el tiempo en que Chile todavía no perdona, creo que se justifica porque si la gente que vive de cerca todo esto necesita saber las cosas para perdonar... y espero que de una vez por todas nos sanemos de este mal y dejemos el luto, pero no se puede hasta que no se sepa lo que verdaderamente pasó.

Por otro lado lo de las torres gemelas sí lo viví, pero la verdad es que no me afectó, aunque suene muy gracioso, cuando pasó lo del atentado a las torres yo ni siquiera sabía lo que eran las torres gemelas (sé que es muy desenchufado de mi parte, pero es así)... Mi opinión es que es muy terrible que muriera tanta gente inocente en ese hecho horrible y no lo justifico, salvo por el hecho que EE.UU está cosechando todo lo que sembró y creo que le falta muuuucho por cosechar, y lamentablemente siempre se afectan los más débiles.

Javiera Barcos M.

6:54 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Antes de escribir mi post, quiero dejar muy en claro que personalmente me considero de centro en materias políticas, por lo que espero no ser malinterpretado.
Hay un dicho que va: “la historia la escriben los que ganan”, creo que en nuestro caso es así.
Por un lado, considero lamentable las muertes y torturas ocurridas después del golpe de Estado, la enorme mayoría de ellas fueron injustificadas. Pero al mismo tiempo, creo que es muy poco mencionado el hecho de que algunas de esas personas pertenecían a grupos violentos que apoyaban el uso de armas para lograr sus objetivos. Muchos de estos grupos fueron apoyados durante el gobierno del Dr. Salvador Allende y después del golpe, muchos intentaron volver al poder por medios armados (ejemplo claro de esto son los depósitos de armas encontrados en carrizal bajo). Muchos de ellos huyeron del país, y algunos volvieron años después (cuando la cosa ya estaba calmada) para tomar el control nuevamente.
También nunca se menciona la muerte de militares en esta lucha, si bien muchos de ellos abusaron de su poder, también hay casos de hombres que murieron intentando mantener el orden.
Por último (y aquí entra la historia de parte de mi familia), poco se menciona de las familias que se vieron obligadas a huir durante el gobierno del Dr. Allende pues todo lo que habían construido con años de esfuerzo se les había quitado e incluso recibían amenazas de parte de grupos como los mencionados anteriormente.
Con lo que he escrito no busco un enfrentamiento, no busco violencia, no quiero herir a nadie, sino que simplemente quiero mostrar un lado de la moneda del que poco se habla y poco se sabe. Para mí el 11 de Septiembre es una fecha que tiene que ser recordada, pero con el fin de que no tengamos que volver a eso. Creo que sería ideal si las manifestaciones en este día fueran pacíficas y con el fin de recordar más que destruir todo intento de reconciliación existente (si bien es cierto que la mayoría de las personas que generan destrozos en este día son jóvenes que muchas veces no buscan más que destruir y no vivieron en la época mencionada).
Finalmente, vuelvo a “la historia la escriben los que ganan”; los mismos que huyeron en un momento son hoy en día la clase política dirigente e incluso muchos de los que en algún momento pertenecieron a un grupo armado, hoy son senadores o personas en altos cargos del sector público. Obviamente, poco se muestra de ese lado de la historia.

“El que controla el presente, controla el pasado. Y el que controla el pasado, controla el futuro.” (“1984”, George Orwell)

Rafael Mellafe Plaza
Norbert117@hotmail.com

6:58 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

P.d: No quise hablar mucho del 11 de Septiembre en Estados Unidos por un tema del largo de mi comentario.

Rafael Mellafe Plaza

7:00 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

El 11 de septiembre es una fecha para reflexionar acerca de los atroces acontecimientos de 1973, para no olvidar lo “inhumano que puede ser el humano”. Creo que el exceso de poder vuelve criminales a las personas.

También es una fecha para advertir todas las medidas que se tomaron durante el régimen militar, que aún se ejecutan y que disminuyen el bienestar de la mayoría de la población (la clase media y baja). Me refiero a las AFPs que le retienen parte del sueldo a los trabajadores, ganan MUCHO dinero con él, y no dejan que el trabajador disfrute de su dinero mientras pueda, sino que le permiten usarlo cuando ya está viejo.

El 11 de Septiembre, es la única fecha que convoca a los chilenos —de verdad— a reclamar por las injusticias que aún se cometen desde 1973, y a exigir que no abusen más de la ignorancia de la gente, sino que le permitan surgir, brindándole más oportunidades (en especial educación).
Para eso es necesario acabar con comercios inexplicables con extranjeros, como los del Cobre y otros minerales. Actividades donde su aporte a la comunidad no se compara con el daño al entorno y las ganancias que obtienen.

Fabian Abarza

7:50 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

En lo personal y familiar esta fecha no tiene mucha significancia, mas allá de vernos afectados por cortes de luz en mi comuna, encontrar neumáticos quemados en el camino, y en lo estudiantil que las clases se suspendan generalmente temprano por el tema de seguridad en el regreso a casa, no es una fecha que signifique motivo de celebración o recuerdo para mi y mi familia. Si respeto mucho a quienes sufrieron en esas fechas (directa o indirectamente), pero no justifico a quienes no lo vivieron sigan con ese rencor, y si hay temas pendientes, dejar que los organismos competentes los resuelvan, pero que eso no signifique que por gente que causa destrozos todos los años, nosotros también tengamos que sufrir consecuencias. Existe gente que el dolor lo lleva por dentro y no anda por la calle causando destrozos o provocando manifestaciones que es sabido en que terminan, viven su dolor en paz con ganas de dar vuelta la pagina y se proyecta a vivir un mejor futuro.

Para mi existe una diferencia al hablar de lo Publico entre la dictadura y la democracia, como ejemplo puedo nombrar los “toque de queda” que se vivieron por esos años, pero cuando los presidentes anuncian proyectos como el AUGE, las Licitaciones de las Autopistas con todo lo que hay detrás (cobros, concesiones, etc.), acaso tampoco son una especie de imposición, no digo que para cada cosa que el Presidente decida hacer para el progreso del país tenga que llamar al plebiscito, pero como la desigualdad en este país es tremenda la gente mas pobre es la que mas se ve afectada, y tiene nada mas que acatar, al igual que el resto de la población, lo que el presidente decida con claras diferencias en el impacto sobre los bolsillos. No son comparables, es cierto pero trate de decir lo que pienso sobre lo planteado de si ¿Hay diferencia cuando se habla de Lo Público en dictadura y en democracia?

César Catalán H.
Agronomía
cesario25@hotmail.com

8:08 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

A “mi parecer”, siento que el 11 de septiembre de 1973, es un día importante sin duda. Debe recordarse con fines reflexivos, analizar que se hizo mal, en el antes y después del 11.

Estoy de acuerdo con el comentario de Rafael Mellafe “la historia la escriben los que ganan”. Siempre estaremos influenciados por los dos sectores que intervinieron en esa década, aunque debemos ser capaces de escuchar y analizar lo que recibimos y no segarnos a los intereses de cada movimiento.

Creo además de muchas cosas malas que pasaron durante ese periodo, sin duda algo que me causa demasiada molestia, es la caracterización del derechista y el izquierdista, casi como los dos únicos modelos existentes. Si uno no honra la memoria o critica al señor Allende, es un “momio”; o al revés, si uno estuviera de acuerdo con algunas de sus ideas de mejoras sociales, seria un comunista. Lo comento porque más de alguna vez me ha pasado en alguna de mis conversaciones con mis pares, que por tener un comentario distinto me han colocado alguno de estos dos sustantivos.

Con respecto al atentado a las torres gemelas, la relación que encuentro, es demostrar que un suceso importante puede marcar por muchos años, un día de nuestro calendario.

Y creo que cada Democracia, tiene algo de dictadura para prevalecer.

Por ultimo “No quiero ser Allendista ni quiero ser Pinochetista, solo quiero ser Chileno”


Héctor Garcés
Ing. Agronómica

8:24 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Al leer el comentario de Carla Dosque y su frase “Por la boca muere el pez”, recordé que alguna vez mi papá me dijo: “Nunca hables de política en la universidad o en el trabajo”.
Pienso en esto y creo que esto debe quedar en el pasado ya que estamos en otros tiempos y supongo que tenemos la educación suficiente como para expresar libremente nuestras ideas sin que nos ataquen y escuchar con respeto a los que no piensan como nosotros.
Como dice casi el 100% de los comentarios, obviamente no fuimos testigos de lo que pasó en el año 73, pero tenemos la experiencia de nuestras personas mas cercanas para hacernos una idea de lo que pasaba en esos tiempos.
Mi familia no era de muchas ideas políticas y no pertenecían a ningún partido. Sin embargo se vieron muy perjudicados durante el gobierno de Allende por la escasez en general y en la dictadura militar por las pocas libertades que tenían.
Personalmente no culpo a Allende de todo lo que pasó, al final de cuentas fue el que pagó más caro por los errores de un conjunto de personas incluido él mismo que quizás pecó de soberbia y no dejó el poder cuando se dio cuenta de que nunca tendría el mas mínimo apoyo de la oposición.
Creo que en ese momento se necesitaba un cambio urgente, claro que los medios por los cuales se logró ese cambio no me parecen correctos, el perder tantas cosas: la democracia, las libertades en general, los más básicos derechos del ser humano. Este costo fue demasiado grande y absolutamente innecesario a mi parecer, pienso en el sufrimiento que tendría si un ser querido fuera asesinado o pasara por las atrocidades a las que fueron sometidos muchos compatriotas...tíos, padres o abuelos de algunos de mis amigos o vecinos.
Con respecto a la caída de las torres gemelas solo ligo este suceso con nuestra historia reciente en la fecha, creo que de lo que mas me acuerdo es que ese día prácticamente no hubo disturbios, parece que ante una mayor desgracia se nos olvidan nuestros propios problemas y aflora la compasión y la empatía.
Agradezco siempre por el país en el que vivo, quizás no es la copia feliz del Edén, pero aun no se estrellan aviones contra los edificios y somos libres de hacer o decir lo que se nos ocurra, siempre y cuando no afecte a los demás, porque en democracia lo publico nos compete a cada uno de los que ejercemos nuestros deberes cívicos.

Sheryl Faray
sherylfaray@hotmail.com
Ing. Agronómica.

9:22 p. m.  
Blogger Unknown said...

Bueno el 11 de septiembre sin duda es una fecha que trae distintos recuerdos y sentimientos a nivel general. Personalmente trato siempre en la cotidianidad de no defender con euforia mi postura política, ya que encuentro que nuestra generación tiene fuertes discusiones sobre este tema, lo cual no ayuda en nada la unión nacional. Pero sinceramente y desgraciadamente es un hecho que no se puede olvidar. En particular no tengo ninguna muerte de algún familiar, pero aún así encuentro horroroso lo sucedido y no puedo estar indiferente a los hechos del pasado, aunque quiera mirar al futuro.

Creo que si hay diferencia entre lo público en dictadura y en democracia, siento que ahora uno esta mucho mas cercano a la información, lo que es un punto fundamental para que algo sea público, sin embargo, ciertos temas todavía se encuentran en secreto y no se dan a la luz pública. En los últimos años de democracia nos hemos dado cuenta de distintos hechos que se destapan mucho después de sucedidos, lo que me genera una impresión de privacidad al no saber cosas que nos influyen a todos como residentes de este país, un claro ejemplo es el transantiago.

Al hablar de la caída de las Torres Gemelas, lo único que lo liga a nuestro 11 de septiembre, es la muerte de personas inocentes y cómo el poder de ciertos grupos pueden causar acontecimientos que marcan la vida de miles de personas.
Mª Carolina Gazmuri O.
Carolinagazmuri@gmail.com

9:30 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Aunque parece muy lejano, de acuerdo a la ubicación temporal en que ocurrieron los hechos, para la mayoría de los veiteañeros de este país (en los cuales me incluyo), las consecuencias de los que ocurrió el 11 de septiembre del 73, son muy visibles hoy en día. Mucha protesta, mucha violencia, mucho rencor, muchos recuerdos, mucha decepción por el paso del tiempo, en general mucha nostalgia. Bajo la perspectiva lógica, ninguno de los jóvenes de hoy, sabe con certeza que fue lo que ocurrió, ni que lo detono, solo por el simple hecho, de que no estuvieron presentes, y su versión sobre lo ocurrido, se basa en un cúmulo de experiencias transmitidas por sus cercanos. Lo antojadizo de esta situación, hace que estos relatos puedan contener experiencias muy nefastas, como otras muy distintas, hasta positivas, en un contexto de casi una pseudo guerra civil. Ante esta situación, tenemos algo de donde aferrarnos, los hechos, son lo único objetivo, dentro de una diversidad de versiones, y justamente estos nos dicen, que hubo muertes, descontento social, inestabilidad económica, injusticias, restricciones a las libertades personales, horrendos actos en contra de la integridad de otros seres humanos, etc.
Ante esta evidente polarización de las versiones y experiencias (siguiendo la lógica de que para una acción o hecho, siempre existe más de un punto de vista), cuesta mucho alejarse de lo emotivo y pasional, para forjarse una idea más general de acuerdo a los hechos. Los hechos nos dicen, que ante un clima social, muy agitado, por la inestabilidad económica, existe una rebelión por parte de un de los poderes del estado, que cegado por el poder incurre en excesos evidentes, que conllevan a la crueldad y la muerte, y todo esto para reformar con disciplina severa y mayor estructura económica (aspecto que se creía fundamenta, para el orden social), la nación que conocemos ahora, todo esto llevado a un contexto político, con ideologías casi dogmáticas muy severas uno de otro, y una competencia casi a nivel mundial.
Hoy en día, el odio y las diferencias que parecen irreconciliables, nos ah brindado episodios igual de dantescos como lo acontecidos en Chile, el atentado al centro mundial de comercio, en Estados Unidos el 11 de Septiembre del 2001, que como hecho fue tan impactante para los demás países, que paralizo todo, inclusive, paso a segundo plano toda manifestación por el 11 del 73, aquí en Chile.
Tanto en Chile, ya a casi 34 años de lo sucedido el 11 del ’73, como en Estados Unidos, a 6 años de lo sucedido el 11 del 2001, estos hechos marcan, como quien marca una hoja de un libro, la historia de estas naciones para siempre, ya que estamos destinados a recordarlas por siempre, ya que dependiendo del bienestar o malestar de la sociedad se conmemora con distintos matices, ya que todo acto trae consigo una consecuencia, ya que existen heridas que nunca sanan, ya que todos los días miramos de frente los frutos de esos actos. La sociedad Chilena cambio después ese 11 de Septiembre, al igual que la sociedad Estadounidense en el 2001, estos hechos no hacen mas que recordarnos que no estamos solos, que nuestra manera de ver la vida puede no ser la misma que la de los demás, que al final de todo, debimos para y mirar que estábamos haciendo mal.


Rodrigo Ignacio González Molina
ignacio_mlna@vtr.net
11 de septiembre 2007

6:59 a. m.  
Blogger Unknown said...

Mi postura politica en la Universidad me ha traido mas de un mal rato, soy derechista y creo que fielmente en que el 11 de septiembre de 1973 se celebra. Aunque mis pensamientos han ido evolucionando con el tiempo, tengo claro de todos los abusos cometidos durante la dictadura, y aunque algunos los comparto, hay otros que no tienen perdon alguno.
Por todo lo sucedido, con los familiares desparecidos, con lo exiliados (que como experiencia personal, viven mucho mejor afuera, y he escuchado a mas de alguno decir que no vuelven a Chile por nada del mundo) existe un odio demaciado grande entre los distintos partidos politicos en nuestro país, que mientras no se abran las mentes y sean capaces de superar algunas cosas, es muy lejana la reconciliación entre las personas...
Personalmente no tengo malas experiencias familiares del periodo de dictadura, por lo tanto no tengo por qué tener rencor, mi familia, al contario, mejoró en muchos aspectos su vida, y el gobiernos antes del 73 los tenia muertos de hambre.
Lo de las Torres Gemelas, creo que es una coincidencia demaciado grande, si bien, creo que matar por matar no es concebible, cuando uno tiene una razón, sobre todo tan fuerte como lo es la religión, las cosas tienden a ser un poco más aceptables, no quiero decir con esto que estoy a favor de las matanzas, y que creo que lo de las Torres Gemelas tiene alguna justificación, solo creo que es un poco mas aceptable en terminos de fines y de consecuancia.
Tamara Bustamante San Martín
tamarabsm@gmail.com

7:49 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

En lo personal nunca tuve una relación directa con lo acontecido el 11 de septiembre salvo un ti que fue detenido pero no desapareció ni guarda rencor, creo que era partidario del golpe al fin y al cabo...
Claro que aun no nacía para ese tiempo, punto de vital importancia para ser objetivo, sin embargo creo que se cometieron atrocidades, si bien alguien puede decir que el gobierno de turno no lo estaba haciendo de maravilla creo que la forma de influir en esto fue, lejos, completamente errónea sin respeto por la libertad y para que hablar de los derechos humanos... Bueno creo que este es un tema discutido “demassss” pero si hay algo que me da pena es no haber podido vivir en el tiempo en que Neruda era senador, y Víctor Jara cantaba su visión del mundo, importante fue la perdida de cultura que tuvo nuestro país, con la fuga de grandes pensadores y la perdida de muchos de ellos...Hasta ahí mi comentario...
Rodrigo Pérez Valdés.

8:00 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

En mi familia, gracias a Dios, no existe ninguna persona desaparecida. Pero si se, que dos de mis tíos si estuvieron reinvolucrados en el tema. Uno de ellos era mayor de edad y estuvo escondido, nadie sabe donde, como por un mes. Es que el vivia con mucha gente que era como recomunista, de hecho mucho de sus amigos fuernon exiliados, y se que uno de ellos estuvo detenido y lo trataron remal, le ponian elecricidad en sus partes intimas, le pegaban, etc. Ahora el vive en Francia, no quiere volver a Chile, y alla escribio un libro que tiene que ver con todo esto. Mi tio se fue a Australia, el si a vuelto. Mi otro tío que estuvo como "metido" con esto, fue de mono, tenia como 15 años, a el no le paso nada.
Es raro en todo caso, por que mi abuelo paterno de era de ultra derecha.
Yo creo que lo que escribio Juan Pablo, es cierto. Para que impregnar a nuevas generaciones con rencores que ya son añejos, de verdad que lo encuentro prehistorico, igual un tema pasado. Lo que de el nos queda, son enseñanzas, para poder aprender a vivir mejor, y tratar de que no vuelva a pasar otra vez. Pero nos empapamos de lo malo que queda. No aprendemos ni sacamos una lección.

Javiera Wilson
Ing. Agronómica

9:38 a. m.  
Blogger Unknown said...

Considero que las dictaduras no son buenas en ningún sentido, pero justificables en algunos casos. El 11 de Septiembre en Chile es un día en el que considero no se conmemora absolutamente nada bueno, la dictadura militar en Chile es uno de los casos no justificables y el aniversario de ese día personalmente me provoca angustia y rabia. ´
La relación con la caída de las torres gemelas considero que no existe por lo menos politicamente.
Ahora bien, el día 11 de Septiembre es un día donde se recuerdan calamidades mundiales y si bien, el tiempo se encarga de olvidarlas, la sensación de tanto dolor y sufrimiento no es fácil de erradicarlo.

Paula Becerra
Ingenieria Forestal
dadiepia@gmail.com

9:50 a. m.  
Blogger Unknown said...

La verdad mi postura política y el hecho de haber pertenecido a una rama de las fuerzas armadas me a traído mas de un mal rato, ya que mi postura es totalmente derechista y a favor de lo ocurrido el 11 de septiembre. Con esto no quiero decir o hacer ojos ciegos de que se cometieron abusos y muertes injustificadas. La verdad al contrario de lo que muchos podrían pensar no vengo de una familia completamente derechista es mas, creo pensar q pertenezco al 10% de la fracción derechista de mi familia, pero por lo mismo soy capaz de respetar las distintas tendencias políticas. Al hablar globalmente del 11 de septiembre pienso que mientras no haya un perdón y una preconciliación en nuestro país, seguirán quedando destrozos y malos ratos para el 11 de septiembre, pero que mas se puede decir ya es una parte de nuestro país y es una herida que nunca va a sanar y siempre va a estar latente en la historia de nuestro país.

Con respecto a lo de las torres gemelas, totalmente en contra ya que la matanza que se produjo no tuvo ni un fin, si no perteneció a un grupo de fanáticos que perdieron el sentido común y trataron de darle una justificación religiosa.

Ruben Jerez B.
Ing. Forestal

10:03 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

lo ocurrido el 11 de septiembre del 73 demuestra la crueldad de cierta gente, lo poco humano que llegaron a ser.
Al igual que otros compañeros mi familia no fue afectada del todo pero si quedan los recurdos de lo vivido y la esperanza de que no vuelva a ocurrir.

Rocío Araya Lopez
Ing. agronómica

12:57 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

para mi seta fecha no significa mucho, para mi grupo familiar es un tema de divicion,lo fue antes y despues del 11 de septiembre del 73, pero ahora creo que no vale la pena vivir del pasado pero no hay que alvidar que se evito una guerra civil, que ubieron causas que probocaron el golpe de estado y que por muy publico que sea un estado no es nesesario que todo chile viva a costillas de este solo por perteneser a un determinado partido.
para mi la politica divide confronta y rara ves une,por lo que hay que tener la cxabeza y la lengua muy fria al momento de tratar estos temas.
Para finalizar siento que para lograr unidad nacional y proyectos comunes en chile se deve dejar atras las heridas provocadas por esa epoca populista y represiva, y creo que es inaseptable que un ser humano le quite la vida a otro por tener o no informacion o por ser de un determinado partido o negarle el alimento por no estar inscrito en determinado partido.
la historia es eso un potpurri de vivensias y historias , no ahí que olvidar pero si sanar.

Niblado Arredondo
ing.agronomica

6:39 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Creo que lo acontecido el 11 de septiembre del año ’73 no puede volver a ocurrir, me parece que fue aberrante la forma en que los militares decidieron solucionar el problema que vivía nuestro país, porque es cierto que la economía estaba deteriorada, que la inflación era enorme, que había un descontento general de la población por las carencias; sin embargo, con nada se justifica la violación a los derechos humanos: asesinar por tener ideales y pensamientos distintos a los que ellos concebían como correctos, la forma macabra en que fueron torturados muchos, tanto directamente con castigos físicos (a la vez también psicológicos), como de manera indirecta por la tortura que vivieron los familiares de aquellos que detuvieron un día y no volvieron nunca más, y el dolor de la lejanía de los que partieron al exilio.

Si bien a mi no me afectó directamente, sí conozco a personas que tuvieron familiares que fueron torturados, y desaparecidos y el dolor que sienten no es menor y, si hacemos el ejercicio de ponernos en el lugar de ellos, es increíble la angustia que puede generar el sólo hecho de pensar en que apliquen choques eléctricos a tu mamá, o que le metan ratas por la vagina a tu hermana, o que un día veas salir a tu papá y que no vuelva nunca más a casa y que sepas que no vuelve porque lo mataron, es por esto que considero justo que quienes padecieron esto puedan expresar lo que sienten: la rabia, la pena, el dolor, la incertidumbre de saber dónde está ese ser querido, como dijo uno de nuestros compañeros: que vivan su luto. Además este es un hecho en nuestra historia que es reciente, aún viven generaciones a las que les afectó la ausencia de un padre o una madre, el exilio, las torturas, etc. Asimismo se propaga por las generaciones en forma de rencor hacia ese acontecimiento y los personajes que tanto daño le hicieron a sus propios familiares y amigos.

Creo también que como todo, al pasar los años, se tergiversa: las manifestaciones terminan con encapuchados cuyo objetivo es saquear la tienda más cercana y eso muestra que con el paso del tiempo se ha ido perdiendo un poco el sentido de las manifestaciones, porque también se diluye el sentimiento en la medida que se nos cuenta y no lo hemos vivido.

Pienso que finalmente llegará un momento en que este día se recuerde como el inicio de un proceso histórico difícil de nuestro Chile, pero que ya no duela, aunque para eso falta mucho tiempo, mucho que hacer y heridas que sanar, como lo son el sancionar a los que actuaron en contra de los derecho humanos y encontrar la mayor cantidad de restos de cuerpos posibles para tener un lugar donde llorar a sus muertos y de esta forma cerrar un ciclo en sus vidas y en esa parte de la historia de nuestro país.
Erika Vera

8:34 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Lo que ocurrió aquel día no fue otra cosa que el remate a un gobierno moribundo que había estado siendo envenenado desde hacía ya algún tiempo por los poderes político-económicos que se veían afectados negativamente con todos los cambios que se estaban instaurando con el gobierno de Allende.

Es lamentable que se necesite de un acontecimiento (qué acontecimiento, crimen) de tal magnitud como fue el Golpe de Estado para conseguir que el ingrato pueblo de un país valore la democracia. Lo peor de todo es que ni siquiera esto bastó para que los chilenos lo valoraran; es mas, cada 11 de septiembre los que salen a causar destrozos no hacen otra cosa que causar todo el daño que no pudieron causar durante los toques de queda de la dictadura y, de paso, recordarnos al resto de la sociedad, de la manera mas absurda, los terrores de aquella oscura época. Lo que quiero decir es que cada noche de 11 de septiembre, los chilenos no podemos salir a las calles, porque hay un montón de inconcientes allá afuera tirando cadenas al tendido eléctrico, quemando neumáticos y saqueando almacenes. Cada noche de 11 de septiembre es una noche de toque de queda para la ciudadanía.

Con respecto a lo público durante la dictadura v/s lo público durante la democracia, me parece que sigue existiendo cierta forma de "toque de queda" en el subconsciente de muchos de los chilenos que vivieron en carne propia lo acaecido en ese entonces. Me refiero a que aun queda mucha represión internalizada en los chilenos, lo cual se refleja en las actitudes que toman frente a muchos temas que eran tabú durante la dictadura y que hoy no debieran serlo, actitudes como estrechez de mente e intolerancia.

Para terminar, considero que si existe cierto vínculo entre los atentados terroristas del 11 de septiembre de 1973 y los del 11 de septiembre del 2001. El primero ocurrió gracias a la intervención directa del gobierno estadounidense y el segundo, como consecuencia de su acción militar en el Medio Oriente. En ambos casos existían intereses: en el primero estaba el interés político de debilitar a la potencia enemiga (recordemos que ocurrió durante la guerra fría) mediante la destrucción de una “colonia” por así decirlo, del imperio socialista en América Latina; en el segundo, estaba el interés económico de apoderarse del petróleo mediante el poder militar, mal camuflado como un intento altruista de liberar al mundo de la posibilidad de una guerra atómica. Y como última evidencia, tenemos que ambos atentados fueron llevados a cabo por terroristas.


Javier Pérez Garrido, estudiante de Agronomía.

email: javierperezgarrido@gmail.com

9:22 a. m.  
Blogger Unknown said...

Los acontecimientos ocurridos el 11 de septiembre del año 1973, dan cuenta de la poca tolerancia que puede llegar a tener la sociedad, y del grado de odio que tambien se puede tener. En mi opinion los hechos que acontecieron en tal fecha explica un poco la sociedad en la que vivimos hoy, mucho odio, mucho resentimiento social frente a la autoridad, lo que desde mi punto de vista explica la violencia de algunos sectores en el 11 recien pasado. Si se pudiera hacer una suerte de analogia con lo ocurrido el 11 de septiembre del 2001 en Estados Unidos, podriamos decir que ambos hechos marcaron un antes y un despues en la vida del país, y ambos sucesos fueron perpetraods por mentes maquiavelicas. En mi caso, el 11 de septiembre del 1973 no afecto de manera tan directa a mi familia, ya que nadie pertenecia a un partido politico, ni era dirigente de alguna institucion.

7:10 p. m.  
Blogger Rodolfo said...

el 11 de septiembre pasó ya hace mucho tiempo y la intolerancia por ambas partes quizás aún sigue, pero la gente que porvoca los desordenes, sin duda alguna poco saben lo que ocurrio en esa tan importante fecha.
En lo que a mi concierne el golpe de estado no estuvo mal, el problema que ocurrió acá fue el abuso de poder, y como dice la frase "la codicia rompe el saco" eso fue lo que pasó, ojalá algún año tengamos un 11 de septiembre donde no ocurran vandalismos.

Rodolfo Medel Gonzalez
romedel@gmail.com

7:47 p. m.  
Blogger viavidapatiperra said...

hace unos días,vi la pelicula 11-09-2001, son 11 cortometrajes de 11 minutos, de 11 distintos directores, en fin... el tema es que cada director debía dar su vision acerca del hecho ocurrido el 11-09-2001, la caida de las torres gemelas, lo que ocurrio que un de los directores, hizo una comparación entre el 11 de ellos y el 11 de nuestra historia, es tan fuerte lo que muestran sus imagenes, que eran reales osea era tipo documental, quizá nunca las había visto pero cambió lo que pensaba, la maldad de los milicos en contra de gente que simplemente no compartia sus opiniones es aberrante, no puedo entender como tuvieron la cobardía de hacer eso.. en fin.. de todas formas no es una justificación para todo el vandalismo que ocurre hasta hoy.

8:12 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

La verdad que la dictadura en algún sentido no ha cambiado para nada, en este mundo netamente capitalista que vivimos estamos siendo presos de nosotros mismos que es lo peor, acorralados bajo el sistema que nos dejo de “herencia” la dictadura, no podemos ir en contra de este pero si luchar para de algún modo modificarlo

Matías Saavedra
Ingeniería Agronómica

10:32 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

Pienso que el 11 de Septiembre nos marcó a nosotros como genración. Siento que en nuetra generación, la dictadura nos ha marcado mucho. Los que nacimos en plena dictadura, me parece que somos mucho mas reprimidos y distantes frente a los acontencimientos de la sociedad y siento que no tenemos una identidad como generación muy marcada. No sucede lo mismo con los niños que nacieron bajo la "democracia", que son mas liberales. Todas éstas tendencias orientales, como los otaku, oshare, visual....etc (ver el Diario de Eva...) yo las asocio a la libertad de expresión que hubo en esos momentos, en que todo se destapó. A Chile llegaron tendencias que cuando nosostros eramos chicos nunca habiamos escuchado...Y los niños de ahora si las vivieron....po lo que están marcados por otras influencias. A mi me llamó mucho la atención lo que sucedió con los pinguinos, los que siendo muy chicos lograron un movimiento demasiado grande e importante, cosa que nosotros ni siquiera en la universidad hemos logrado.

María José Vera Giglio
cotetini@hotmail.com

2:10 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

El 11 de septiembre es un tema delicado, dificil de tratar ya que hay distintas opiniones y todos los reportajes de ese período no son 100% objetivos.
No tengo mucha opinion al respecto porque todavía no nacia en esa época, pero por lo que me relatan mis familiares, tengo una vision general de lo ocurrido. Segun mis padres, el abastecimiento de alimentos era restringido, formandose grandes filas para comprar algo básico como el pan. También estaban los toques de queda, donde mi mamá me cuenta de las fiestas "de toque a toque".
Este período marcó mucho a la gente, y eso se ve en que todavia afecta hasta el día de hoy, y lo seguirá siendo por mucho tiempo mas.
Con respecto a las torres gemelas, no le encuentro relacion alguna, fue, a mi parecer, una coincidencia. Solo se parecen en lo tragico de lo ocurrido, y que ambas marcaron muy fuerte a la gente.

Nahomi Donoso
naho.x_x@hotmail.com

3:38 p. m.  
Anonymous Anónimo said...

Es lo peor el 11 de Septiembre. Ya pasó hace mucho tiempo, pero nadie lo puede olvidar. A mi no me importa que no lo olviden, ¿tienen que salir a destruir todo a su paso? lo peor es que se ve en las noticias que los que salen a destruir, nisiquiera a marchar, son puros, perdonen el lenguaje, "pendejos" que no tienen idea de lo que pasó, y que nisiquiera habían nacido cuando todo esto ocurrió. Es una fecha ya muy lejana que debería olvidarse para que así el país como conjunto pueda avanzar en armonía, o sino nos quedaremos para siempre pegados en el pasado. A mis padres, esa época les afectó demasiado, ellos tuvieron que hacer largas cloas para comprar alimentos, levantarse a las 7 am para tener un bloque de mantequilla, etc, asi que los entiendo, pero a mi no me pasó nada de eso ni me afectó, pero lo que creo que si yo puedo olvidarlo, todos pueden. ambos lados sufrieron, es verdad, pero para que el país pueda avanzar, hay que olvidar.

con respecto al 11 de septiembre, el incidente de las torres gemelas, es, creo yo, un tema totalmente diferente. lo que ocurrió en ese país fue una venganza contra ellos, fue un atentado de terrorismo puro, y eso si que se debe erradicar del planeta.

Daniel Chávez S.
Ing. Agronómica

9:18 a. m.  

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